Desde tiempos remotos se ha tratado de comprender la influencia de los cuatro elementos pobre todos nosotros. Se les consideraba los ladrillos de construcción del Universo, y muchos creyeron que ellos eran parte también de su estructura básica propia.
Filósofos, astrónomos y sabios los vieron como un reflejo del universo. Estudiaron las estrellas y la naturaleza, y utilizaron la información que reunieron como un método para comprender a su Creador y sí mismos. En cualquier situación, la naturaleza nos rodea, ya estemos en el campo o rodeados de edificios y asfalto. Es comprobado que a la mayoría de nosotros nos tranquiliza caminar por el campo o a lo largo de la playa.
Si nos interesamos en seguir estas creencias antiguas, hallaríamos que la misma naturaleza contiene la clave de mucho conocimiento interno sobre nuestra propia naturaleza, y la parte que desempeñamos en el gran Plan Cósmico.
- Cada día nos calentamos con Fuego,
- Nos bañamos con Agua,
- Sentimos el Viento en nuestros cabellos,
- Caminamos sobre la Tierra.
Se ha hablado de ello en la Antigua Grecia, en leyendas y cuentos de la antigüedad (celtas, indios…) y aparecen en la literatura de cada país de una u otra forma, ya sea en poesía o en prosa.
- El Fuego: es uno de los más importantes de los cuatro.Actividades constructivas: purificar las basuras y cuerpos humanos por medio de la incineración. También se queman las malas yerbas para permitir que se den buenos cultivos. Se ha utilizado para ofrendas en muchas civilizaciones. El fuego permite soldar distintos metales y elementos. El fuego muchas veces se asocia con la magia y la unión: Fuegos de campamento, hogueras de amigos, escenas tórridas frente al fuego… los 4 elementos : agua
- El Aire:nos mantiene con vida, si se aprende a respirar de forma pausada se puede usar como método de relajación y también el aire purifica el ambiente que nos rodea.
Actividad destructiva: ventiscas, vendavales, ciclones y huracanes.
- El Agua: relacionado con la energía, con la naturaleza y con sus propiedades de limpieza.
Actividad destructiva: inundaciones, sequías, naufragios.
- La Tierra: es vital para la producción de los alimentos, para la construcción y mantenimiento de mejores cuerpos físicos.
Su acción destructiva: terremotos, los volcanes y derrumbes. También la devastación de la tierra acaba generando cambios en la fauna y la flora.
- EL FUEGO es deseo. Es entusiasta, calentador, y la chispa de la vida. Es apasionado, emocional, indomable, el más poderoso de las fuerzas de la energía, porque él representa la fuerza del Espíritu. Es una llama que palpita, o una llama que destruye. . . Brilla en el Sol. Danza en el Fuego del hogar, atrae el ojo, y el deseo. Da color a la sangre. Es el pulso de nuestro ser. El Fuego es rojo. Es el calor moderado que mueve con deleite la tierra; el ansia por vivir, la luz por la que vemos. Dinámico, movible, lleno de chispas, atrevido, vital, inteligente en su urgencia. El Fuego es activo, se eleva.